Pancho es un perro que vino del refugio de La Reja. No sabemos la historia anterior pero desde que lo tenemos aprendió que las manos son para caricias y las escobas son para limpiar. Se volvió un dulce juega con baldes de plástico, vive suelto en el refugio, convive bien con sus amigos, es buenito, confía en la gente. Merece una buena familia.